
Si la fotografía hubiese sido captada justo sobre el Polo Sur, el Sol se hubiese mantenido siempre al mismo nivel. Pero como la toma se realizó en la base antártica Concordia (de administración ítalo-francesa), ubicada algo más allá del Polo, a 75 grados de latitud Sur, existe una diferencia de 30 grados de elevación entre la altura del Sol a mediodía y a medianoche.
Para efectuar cada toma, Guillaume Dargaud fijó un trípode como referencia y luego regresó al lugar una vez por hora bajo el frío austral para tomar las fotografías. Sin dudas, era la parte más delicada del proceso ya que muchas cosas podían fallar, y de hecho a veces fallaron. Por ejemplo, en las dos primeras oportunidades, el cielo se nubló impidiendo ver el Sol; en la tercera ocasión, el trípode utilizado como referencia fue cambiado de sitio inadvertidamente por un integrante de la misión antártica; pero la falla más curiosa se produjo cuando, según cuenta Dargaud, “un grupo de bromistas agotó el rollo de la cámara tomando fotografías de sus traseros peludos”.
Así que luego de un intento fallido en 1994, otro en el año 2000 y otros dos más durante el verano de 2004, por fin en noviembre de 2005 el tenaz fotógrafo logró cumplir con su objetivo, apenas dos días antes de la llegada de su relevo en la base antártica.
¡Claro que el resultado valió la pena!
http://www.gdargaud.net/
flojisima panoramica!! jojo
ResponderEliminarUN capo el tipo...
Ya habia visto esa foto, pero no sabia tanto en detalle la historia.